Llevo años escribiendo mis sueños, participando y guiando talleres y grupos en los que las personas me comparten los suyos. Aún así, muchas veces me despierto pensando “Que sueño tan extraño.” Y muchos de mis seguidores me han comentado que les ocurre lo mismo. ¿Por qué sucede esto? ¿Los sueños extraños tienen significado? Sigue leyendo para descubrirlo.
He visto muchas veces y seguramente ustedes también, memes haciendo alusión a lo ilógico de las imágenes oníricas y la improbabilidad de que eso represente algo de valor para el soñador. Yo, inmediatamente veo los símbolos e invitaría al soñador a hacerse algunas preguntar a partir de ellos. Pero me ha pasado también. Y me encanta que los sueños sean una fuente infinita de creatividad y para alguien que trabaja sus sueños, son acertijos que resolver y el premio es un conocimiento más profundo del mundo interior del soñador.
Yo tengo la teoría (y no tengo pruebas pero tampoco dudas) de que los sueños usan este mecanismo para que los recordemos y al mismo tiempo, despierten nuestra curiosidad. Tristemente, la incoherencia de los sueños muchas veces causa que el soñador demerite el mensaje. La verdad es que, aunque el escenario carezca de sentido, nuestras reacciones emocionales son reales y similares a las que experimentamos en la vida diaria. Les voy a poner un ejemplo y aprovecho para recordarles que, al registrar un sueño es una buena práctica ponerle un título, narrarlo en primera persona y en tiempo presente además de marcar el final de la descripción para diferenciarlo de las reflexiones subsecuentes. Yo lo hago escribiendo FDS (Fin del sueño)”.
LA AUDICIÓN
Entro a un salón que es todo de madera, al frente hay una mesa con jurados. Llego tarde a inscribirme a la audición pero les pido que me acepten. Los jurados me permiten participar y aceptan la canción que les propongo. Espero que sea mi turno. Cuando por fin me llaman, olvidó la letra y la melodía. Me siento avergonzada y les pido que me esperen un poco. Me esfuerzo por recordar y me siento frustrada porque no logro hacerlo. “Mi olvido me parece una señal de que esto no es para mi. Gracias por la oportunidad y por su tiempo.” Salgo del salón sintiéndome en paz.
FDS
¡En la vida real, no canto ni en la regadera! Sin embargo, al leer la descripción otra vez, encuentro reacciones y momentos que sí ocurren en la vida diaria:
- Llego tarde
- Espero que sea mi turno
- Me siento avergonzada
- Me siento frustrada porque no logro hacerlo
- Sintiéndome en paz
Como pueden leer, estas frases no tienen nada de extraño. El hecho de sacar estas acciones y emociones del contexto del sueño me permite reconocerlas como mías. Nuestra vida emocional es muy rica pero no siempre nos permitimos experimentarla de forma completa. Escribir un sueño extraño con tantos detalles como sea posible permite conectar con nuestras emociones.
Si estás dispuesto a hacer un trabajo muy profundo puedes explorar las metáforas del sueño para relacionar las imágenes con situaciones en tu vida que provocan esas emociones. Pero si no, escribir tus sueños y releerlos es un gran comienzo.
¿Qué harás la próxima vez que despiertes de un sueño bizarro? ¿Lo escribirás y explorarás o lo condenarás al olvido?